El P. Hans Joachim Lohre, misionero alemán secuestrado hace más de un año, fue liberado este domingo en Malí y ya ha sido trasladado a su país natal, donde se recupera de su largo cautiverio.
El religioso, que pertenece a la sociedad de los Misioneros de África, conocidos como “Padres Blancos”, fue secuestrado el 20 de noviembre de 2022 y su liberación se anunció este domingo por un representante del gobierno de Mali y dos portavoces de la Archidiócesis de Bamako “que pidieron permanecer en el anonimato”, según informa la Agencia Fides.
Aunque las circunstancias de la liberación no se han aclarado, se conoce que habría sido decisiva la negociación llevada de manera directa por el Gobierno de Alemania, que habilitó un vuelo especial para trasladar a Berlín al misionero, originario de Hövelhof, en el este de Westfalia.
El misionero, de 66 años, era conocido en el lugar como “Ha-Jo”, y llevaba más de 30 años desarrollando una importante misión pastoral en el país africano. Allí era responsable del Centro de Fe y Encuentro de Hamdallaye e impartía clases en el Instituto Islámico-Cristiano de Formación (IFIC).
Según detalla Fides, “el día del secuestro se esperaba que el misionero celebrara Misa en la comunidad de Kalaban Coura. Su coche estaba aparcado delante de su casa y los investigadores encontraron más tarde el collar con la cruz cortada del sacerdote junto a su vehículo”.
Aunque no se produjo una reivindicación, fuentes diplomáticas y de seguridad atribuyen el secuestro al llamado Grupo de Apoyo al Islam y a los Musulmanes, vinculado a Al Qaeda.