Los hilos de luces caen uno tras otro, formando una especie de cortina frente a la Basílica de la Natividad en Belén. Luego de la decisión del municipio de suspender las celebraciones navideñas y retirar las decoraciones, los trabajadores están ocupados desmantelando el toldo de luz en la Plaza de la Natividad y en otros lugares de la ciudad, ubicada en el territorio palestino de Cisjordania.
La alcaldesa saliente, Hanna Hanania, dijo a CNA —agencia en inglés de EWTN—, que “Belén, como cualquier otra ciudad palestina, está de luto y triste”. “No podemos celebrar mientras estemos en esta situación”, señaló en referencia a la guerra entre Israel y Hamás, que ha causado miles de muertos, la mayoría en la Franja de Gaza.
En ese sentido, siguiendo lo manifestado por las Iglesias en Tierra Santa, Hanania afirmó que se centrarán en la oración a Dios para “tener paz en la tierra de la paz”.
En una declaración con fecha 10 de noviembre, los patriarcas y líderes de las Iglesias de Jerusalén instaron a los fieles a “para permanecer firmes con aquellos que enfrentan tales aflicciones este año, renunciando a cualquier actividad innecesariamente festiva” y “centrándonos más en el significado espiritual de la Navidad, teniendo en nuestros pensamientos a nuestros hermanos y hermanas afectados por esta guerra y sus consecuencias, y con fervientes oraciones por una paz justa y duradera para nuestra amada Tierra Santa”.
Sin embargo, se seguirá respetando el Status quo, un conjunto de normas que han regulado el acceso y el uso de los principales lugares sagrados desde la época del Imperio otomano. Según estas disposiciones, en vísperas de Adviento, el Custodio de Tierra Santa, P. Francesco Patton, hará su entrada solemne en Belén. De igual manera lo hará el 24 de diciembre, en Nochebuena, por el Patriarca Latino de Jerusalén, Cardenal Pierbattista Pizzaballa.
Pero la procesión por la Calle de las Estrellas, el recorrido que según la tradición hicieron los Reyes Magos, se llevará a cabo sin música y con una presencia reducida de los scouts de Tierra Santa, quienes suelen participar en la procesión.