Michael Voris, fundador de St. Michael's Media, una organización que opera el controvertido medio de comunicación católico Church Militant, renunció esta semana por una violación de la cláusula de “moralidad” de su contrato, que no fue revelada, según indicó la compañía el martes.
Church Militant publicó en su sitio web que a Voris “le habían pedido que renunciara por violar la cláusula de moralidad”, y añadió que “la junta ha aceptado su renuncia".
"Entendemos que esto es un shock para todos ustedes, pero nuestro fundador y exdirector ejecutivo se hará a un lado y se centrará en su salud personal". Y agregaba: "La junta directiva ha optado por no revelar al público los asuntos privados de Michael".
“El apostolado estará rezando por él y les rogamos que hagan lo mismo”, se lee en el comunicado.
La empresa ha generado controversia a lo largo de los años por sus críticas, a menudo severas, a lo que considera un catolicismo laxo o insuficientemente devoto.
El medio ha afirmado que la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos (USCCB, por sus siglas en inglés) “no es católica”, alegando que los obispos “sólo pretenden representar a la Iglesia”. En ocasiones, Church Militant ha realizado protestas frente a asambleas de la USCCB.