La discusión sobre la Tradición que se dio durante el Concilio Vaticano II es la autoridad para las reflexiones del Sínodo de la Sinodalidad, manifestó el sacerdote y teólogo australiano Ormond Rush ante los participantes en el evento eclesial que se lleva a cabo en el Vaticano y que ayer entró a su última semana.
“Después de escucharlos durante estas últimas tres semanas, he tenido la impresión de que algunos de ustedes están lidiando con la noción de Tradición, a la luz de su amor por la verdad”, manifestó al iniciar su discurso en el Aula Pablo VI.
La Tradición “fue un punto importante de discusión en el Concilio Vaticano II”, añadió. “Sus respuestas son, para nosotros, la autoridad que guía nuestras reflexiones sobre los problemas que enfrentamos hoy”.
“Entonces, tal vez el Vaticano II tenga algunas lecciones para este Sínodo, mientras ahora llevan a cabo la síntesis de su discernimiento”, indicó a los más de 360 participantes que se reúnen en la Santa Sede hasta el 29 de octubre.
El teólogo australiano pronunció su discurso a los miembros del Sínodo y al Papa Francisco antes de que procedieran a revisar el borrador del informe de síntesis que resume las conversaciones llevadas a cabo las últimas tres semanas. La asamblea votará para aprobar el documento el sábado, poco antes de su difusión pública.
Hablando sobre el discernimiento, el teólogo les indicó a los delegados del Sínodo que deberían esforzarse por ver con los ojos de Jesús, pero también les advirtió sobre las “trampas” en las que podrían verse “arrastrados hacia formas de pensamiento que no son ‘de Dios’”.