El P. José Filiberto Velázquez Florencio, sacerdote de la Diócesis de Chilpancingo-Chilapa en el estado mexicano de Guerrero, denunció que sufrió un ataque alrededor de las 00:00 horas de este 18 de octubre. El “móvil”, aseguró, fue su trabajo en defensa de los derechos humanos en la zona.
El P. Velázquez Florencio es director del Centro de Derechos de las Víctimas de Violencia “Minerva Bello”, una organización que brinda apoyo a quienes han sufrido agresiones, desapariciones, desplazamientos y asesinatos, que tiene su sede en Chilpancingo.
Entrevistado por ACI Prensa, el sacerdote indicó que el atentado ocurrió cuando regresaba a su domicilio después de brindar asesoramiento a estudiantes provenientes del estado de Chiapas en la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, localidad del estado de Guerrero, cuyo nombre ha conmovido al mundo entero por el drama de los 43 estudiantes desaparecidos en 2014 en un caso aún no esclarecido.
El presbítero indicó que cuando recorría la carretera federal que une las localidades de Tixtla y Chilpancingo, fue “interceptado” por hombres que iban a bordo de una motocicleta. “Primero me disparan por detrás y después ponchan (dañan) la llanta y me cazan por enfrente y (disparan) hacia mí. Afortunadamente para mí es un milagro que la bala no me tocó”, relató.
Consultado sobre si relacionaba el ataque con su labor en defensa de los derechos humanos, el P. Velázquez Florencio respondió: “Sí, es básicamente el móvil”.