En el marco del Día Mundial contra la Pena de Muerte, que se celebra cada 10 de octubre, el Papa Francisco advierte que esta pena “alimenta la sed de venganza”.
En un mensaje difundido a través de su perfil oficial de X (antes Twitter), el Santo Padre defendió que “el derecho a la vida está amenazado allí donde se sigue practicando la pena de muerte”.
“Ésta no puede ser utilizada para una presunta justicia de estado, puesto que no constituye un disuasivo, no ofrece justicia a las víctimas y alimenta la sed de venganza”, remarca el Papa Francisco.
El Día Mundial contra la Pena de Muerte es una fecha en la que se pretende concienciar y movilizar a la sociedad civil, a la opinión pública, a dirigentes políticos, etc., para apoyar el llamado a la “abolición universal” de la pena de muerte.
El Papa Francisco ha manifestado en varias ocasiones su contundente rechazo a esta práctica. De hecho, en 2018 autorizó la modificación del Catecismo de la Iglesia Católica para que fuera considerada “inadmisible” en cualquier caso.