Este jueves 14 de septiembre, el Papa Francisco ha nombrado al P. Antonio Spadaro S.J., hasta ahora director de la revista jesuita La Civiltà Cattolica, nuevo subsecretario del Dicasterio para la Cultura y la Educación del Vaticano, y asumirá este encargo el 1 de enero de 2024.
Licenciado en Filosofía por la Universidad de Messina en 1988, el P. Spadaro emitió los votos solemnes en la Compañía de Jesús en 2007. En 2000 se doctoró en Teología por la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma. Fue incluido en el Colegio de Escritores de la revista La Civiltà Cattolica en 1988 y se convirtió en su director el 6 de septiembre de 2011. Es consultor del Dicasterio para la Cultura y la Educación.
También hoy ha tenido lugar el cambio en la dirección de La Civiltà Cattolica, la revista italiana de los jesuitas, fundada en 1850. A partir del próximo 1 de octubre, la revista estará bajo la conducción del P. Nuno da Silva Gonçalves S.J., quien sustituye a P. Spadaro S.J. luego de 12 años.
El nuevo director de la revista, nombrado hoy por el Prepósito General de la Compañía de Jesús, el P. Arturo Sosa Abascal, se dirigió de inmediato en una nota a los suscriptores y lectores que, escribe, “están en el centro de nuestro trabajo diario y forman una comunidad con la que deseamos fortalecer los lazos y profundizar en el conocimiento mutuo”. La Civiltà Cattolica, asegura el P. Gonçalves, desea ofrecer “un mensaje de esperanza a todos, comprometiéndose en una lectura cristiana del mundo de hoy y mirando hacia el futuro”.
Nacido en Lisboa en 1958, el P. Gonçalves S.J. ha obtenido múltiples licenciaturas y un doctorado en Historia Eclesiástica. Durante su carrera, desempeñó roles importantes en la Universidad Católica Portuguesa y en la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma, incluyendo el cargo de Rector. También es miembro de La Civiltà Cattolica y diversas instituciones académicas en Portugal.
En el número 4158 de la revista, que será publicada el próximo sábado, se encuentran las palabras de despedida del P. Spadaro S.J., bajo cuya dirección la revista de los jesuitas cumplió 170 años de servicio. "Dejo mi compromiso con una gratitud inmensa por la experiencia vivida", escribió el ex director, y "entrego el testigo con un cierto alivio, pero también con un toque de nostalgia por una tarea apasionada que me permitió vivir años muy hermosos y relaciones con los hermanos jesuitas de la redacción y de todo el mundo, más de 200, que se han esforzado por hacer de La Civiltà Cattolica una revista verdaderamente especial”.