Las muertes infantiles producto de la guerra en Ucrania han aumentado un 7% entre mayo y agosto de este año, en comparación con los cuatro meses anteriores, según un informe de Save The Children. El reporte también afirma que los ataques aéreos y con drones se han triplicado en este período de tiempo, aún sin un final aparente al “peligro al que se enfrentan los niños tras 18 meses de guerra”.
“Desde mayo de 2023, un total de 148 niños han sido asesinados o heridos en Ucrania”, afirma el informe, y explica luego que esa cifra lleva el total de víctimas infantiles a más de 1.700 desde el inicio del conflicto armado, en febrero del año pasado. Esa cifra total incluye 545 muertes.
El reporte continúa afirmando que junio de este año ha sido “el mes más mortal hasta la fecha para los niños”, con 11 muertes confirmadas y 43 heridos. Y agrega: “Según datos de la ONU, hubo un incremento en las cifras de bajas civiles entre mayo y agosto, siendo junio el mes con la cifra más alta, ubicada en 865 muertes”.
El Proyecto de Datos sobre Localización y Sucesos en Conflictos Armados (ACLED por sus siglas en inglés), reportó que entre enero y abril de este año, se registraron 459 ataques aéreos y con drones, sin embargo esta cifra se elevó hasta los 1.432 entre mayo y agosto. El 95% de estos ataques se hicieron en áreas pobladas.
Save The Children también relata algunas tragedias que ha dejado la guerra. El 11 de agosto, en Kolomyia, al oeste de Ucrania, “murió un niño de 8 años luego de que un misil impactara en el patio trasero de su casa”. Dos días después, en la región de Kherson, una familia de cuatro miembros murió a causa de los bombardeos, entre ellos “un niño de 12 años y una bebé de 23 días”. La semana pasada, el 19 de agosto, una niña de 6 años murió debido a los ataques sobre la ciudad de Chernihiv.
"Ucrania lleva 18 meses de guerra a gran escala y no parece haber tregua para las peligrosas circunstancias que soportan los niños y las familias. Hemos sido testigos de numerosos ataques contra zonas pobladas que se cobraron la vida de niños y de sus padres, dejaron a cientos de personas heridas o gravemente angustiadas y dañaron o destruyeron viviendas, sumiendo a miles de familias en la incertidumbre”, afirmó Amjad Yamin, director de Save The Children en Ucrania.