El presidente de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), Mons. Oscar Vicente Ojea, recibió en la sede del Episcopado a referentes gremiales de trenes subterráneos y premetro de Buenos Aires, quienes le compartieron su reclamo por la presencia de asbesto en los coches, que provoca daño ambiental y riesgos en la salud.
Mons. Ojea escuchó la demanda de los denominados "metrodelegados" y anheló una pronta solución.
El conflicto lleva varios meses y ha incluido medidas de fuerza como la apertura de molinetes y paros que afectaron a las distintas líneas.
Los trabajadores solicitan al Gobierno de la Ciudad que se quite de los trenes el asbesto, una sustancia mineral cancerígena, y se mantenga a los empleados bajo supervisión médica.
Denuncian que por esta causa ya fallecieron tres compañeros, y otros once presentan un diagnóstico de neumoconiosis, provocado por la inhalación del material.
Las fibras de asbesto, que se encuentran en los coches y en el aire, ponen en riesgo la salud de trabajadores y pasajeros, además de ocasionar daños ambientales.