El Comité Internacional de Justicia y Paz del Episcopado estadounidense aseguró que la prisión que sufre Mons. Rolando Álvarez, condenado en febrero por la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo a 26 años y 4 meses de cárcel en Nicaragua, es injusta y debe terminar "lo antes posible".
En una nota publicada este 12 de julio y firmada por Mons. David J. Malloy, presidente del Comité, se recuerda el fracaso de las recientes negociaciones para liberar al Obispo de Matagalpa y se anima a la oración por su libertad.
"Insto a los Estados Unidos y a la comunidad internacional a seguir rezando por el obispo y abogando por su liberación", precisa la nota.
El también Obispo de Rockford felicitó a la "Corte Interamericana de Derechos Humanos por solicitar la libertad inmediata de Mons. Álvarez. El consenso de la comunidad internacional es claro: el continuo encarcelamiento del obispo es injusto y debe terminar lo antes posible".
"Que Nuestra Señora de la Inmaculada Concepción, patrona de Nicaragua y de Estados Unidos, ilumine los corazones de quienes toman las decisiones y que su manto maternal proteja a la Iglesia en Nicaragua", concluyó.
Las negociaciones que sostenía la dictadura de Daniel Ortega con la Iglesia Católica en Nicaragua para liberar y deportar a Mons. Rolando Álvarez fracasaron el 5 de julio, y el Obispo fue regresado a la cárcel conocida como "La Modelo", donde son encerrados los presos políticos del régimen.