En medio de la operación militar israelí en Yenín, ciudad palestina en el norte de Cisjordania, la parroquia del lugar quedó seriamente dañada. En ese difícil contexto el Patriarca Latino de Jerusalén, Mons. Pierbattista Pizzaballa, condenó los actos de violencia contra la población, llamando al diálogo.
A través de un comunicado, publicado en árabe e inglés, el Arzobispo señaló: "En los dos últimos días, la ciudad de Yenín ha sido objeto de una agresión isaelí sin precedentes, que también ha causado muchos daños a nuestra parroquia latina de Yenín".
En este sentido, el Patriarca Latino de Jerusalén expresó que condenaban dicha violencia, exigían un alto al fuego y esperaban "la búsqueda de la paz y el diálogo para evitar otros futuros ataques injustificados contra la población".
Junto con el mensaje se hicieron públicas algunas fotos en las que se pueden ver las ventanas rotas de la parroquia, los vidrios regados por el suelo y las bancas llenas de polvo y tierra. Afortunadamente, el altar no sufrió daños.
El ataque en Yenín