Cardenal enviado por el Papa a Ucrania se pone el delantal para servir a los necesitados

Más de 80 pueblos y ciudades quedaron inundados, 20 mil hectáreas de tierras de cultivo fueron destruidas y más de 150 toneladas de petróleo se vertieron tras un ataque ruso. 

En declaraciones a Vatican News, el limosnero del Papa describió la situación que se encontró al llegar la ciudad ucraniana: "Está desierto, de vez en cuando oímos sirenas y cuando entramos había bombardeos, podíamos ver humo".

El Purpurado aseguró que no hay un día que el Papa no rece por la "martirizada" Ucrania y se refirió a su visita como "una misión evangélica".

El Cardenal Krajewski, miembro de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, llevó en el camión varios alimentos y más de 100 mil sopas para los afectados. 

Los alimentos proceden en su mayoría de Corea y los medicamentos fueron donados desde el Hospital Gemelli de Roma.

Según un comunicado publicado por la Santa Sede, la misión del Cardenal es "estar con ellos, rezar con ellos y también dejarles una ayuda muy concreta, un signo de unidad con el Papa que quiere estar cerca de los que sufren".

Además, el Vaticano informó que saldrá en los próximos días un segundo camión lleno de alimentos, así como de medicinas y material médico, que se entregará en las zonas más afectadas por la explosión de la presa.