Cáritas Chile lleva adelante la campaña "Por un invierno solidario, juntos en esta emergencia climática" para colaborar con los damnificados por las inundaciones en las zonas centro-sur del país.
La región sufre por estas horas las consecuencias de un sistema frontal, un fenómeno provocado por la interacción entre dos vientos o masas de aire con características diferentes de temperatura o humedad.
Esto ha afectado la zona con abundantes lluvias, provocando el desborde del río Maule, con al menos dos muertos y casi 10.000 evacuados.
Con cientos de familias y comunidades damnificadas por las peores lluvias en los últimos 30 años, la campaña nacional impulsada por Cáritas busca recaudar fondos para responder a las necesidades provocadas por la emergencia climática.
A través de su Programa de Medio Ambiente, Gestión del Riesgo y Emergencia (MAGRE), y en coordinación con los equipos diocesanos de la zona, Cáritas trabaja desde el primer momento en la evaluación de daños y necesidades de las comunidades.
La emergencia no cesa, y la Dirección Meteorológica de Chile emitió una alerta ante la posibilidad de trombas marinas, tormentas eléctricas, vientos y granizo, e incluso probables tornados. El pronóstico es de fenómenos "de severidad intensa" y con riesgos materiales y en la vida de los habitantes.