"Una vía practicable para evitar las tragedias y los peligros ligados al tráfico de seres humanos", expresó el Papa Francisco sobre los corredores humanitarios, establecidos desde 2016 para responder a la situación migratoria, siempre más dramática, en la ruta del mar Mediterráneo.
El Santo Padre lo expresó esta mañana al recibir en audiencia a los refugiados llegados a Europa a través de los corredores humanitarios, junto a las familias y representantes de las comunidades que los acogen y procuran su integración.
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Estas instituciones son la Comunidad de San Egidio, la Federación de las Iglesias Evangélicas, la Mesa Valdense y la Iglesia en Italia "que fue generosa", en particular Cáritas.
El Papa, que también agradeció a los gobiernos que han recibido a los migrantes, escuchó algunos testimonios y explicó que los corredores humanitarios "trabajan también por la integración", pues "las personas son acompañadas de principio a fin".
El Pontífice afirmó que los corredores humanitarios representan el bello rostro de Europa, al recordar los casos dramáticos que llegan desde Libia, que es parte de la ruta que siguen los migrantes que buscan arribar desde África.
Sobre estos casos, el Papa Francisco dijo a los migrantes que "han mostrado una firme voluntad de vivir libres del miedo y de la inseguridad. Han estudiado un nuevo idioma y conocido una nueva sociedad".
El Santo Padre destacó el ecumenismo de esta iniciativa y dijo que si bien todo es difícil, es también fecundo.
Traducido y adaptado por el equipo de ACI Prensa. Publicado originalmente en ACI Stampa.
