En el Mes de la Solidaridad que se vive en Chile, el Vicepresidente de la Conferencia Episcopal Chilena (CECH), Mons. Alejandro Goic, pidió practicar la justicia en las relaciones laborales y recordó que "una empresa es una comunidad de personas, de trabajadores, donde todos deberían participar de los beneficios de la empresa. No sólo el dueño del capital".
En una entrevista concedida a la prensa local, Mons. Goic afirmó que el debate sobre la necesidad de que las empresas paguen un "sueldo ético" de, al menos, 250 mil pesos (unos 517 dólares) está pendiente en el país.
"En los últimos 20 años ha habido un crecimiento económico importantísimo, pero creo que la deuda pendiente es hacer un país más equitativo. Es uno de los países más inequitativos del mundo donde hay pocos que ganan mucho y muchos que ganan poco", comentó.
En el año 2007, Mons. Goic propuso el denominado "sueldo ético" que consiste en poner en manos de los empresarios, de manera libre y no impuesto por ley, la responsabilidad de pagar más del salario mínimo legal si están en condiciones de hacerlo.
"Hay un concepto mental que hay que cambiar, porque ¿qué sentido tiene acumular sin compartir con quienes me ayudan en producir la riqueza que poseo? Se necesita un cambio del corazón. Ponerme en el lugar del trabajador y vivir con los 210 mil pesos del salario mínimo. Uno sabe que con eso no se puede vivir. Debemos aspirar a que la sociedad haga de las remuneraciones un instrumento que impulse mayor justicia en temas laborales. El desafío es hacer una sociedad más equitativa", afirmó.
Finalmente, en la Misa por el del Día de la Solidaridad que se celebró el pasado 18 en memoria de San Alberto Hurtado, Mons. Goic felicitó a todos quienes se dedican a la práctica de la solidaridad, afirmando durante la homilía que "vivir solidariamente es la mejor forma de vivir".