El Obispo de Punta Arenas (Chile) Mons. Bernardo Bastres, denunció que hoy en día la vida de un perro tiene más valor legal que el derecho de los seres humanos.
El Prelado hizo esta declaración a raíz de la plaga de perros callejeros que asedian el centro de Punta Arenas, y que se han convertido en un problema de salud pública, debido a que las autoridades políticas no quieren tomar acciones por temor a ser considerados "insensibles" con los animales.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
"En estos momentos un perro tiene más derechos que una persona", dijo Mons. Bastres, quien denunció que el actual gobierno "está dictando normas sobre la vida humana, como la legalización de la llamada ‘píldora del día después’ y otras políticas referidas al control de la natalidad", pero no se deciden a tomar acción frente a la plaga de perros sin dueño. "Esto es inconsecuente, ya que los temas que tienen que ver con la vida de las personas merecen ser apoyados y discutidos en el Congreso, porque tienen que ver con la regulación de la natalidad del país, no así los derechos de un animal", agregó.
El Prelado recordó que cuando los obispos chilenos se opusieron a la norma del gobierno que obligaba la distribución de la droga abortista Postinor II, el Ministerio de Salud señaló que ésta era "una norma de bien común".
"Sin embargo, con el problema que tenemos con el exceso de perros, resulta que no se dicta una norma, sino que hay que esperar una ley"; agregó Mons. Bastres. "Es decir, en la práctica nos están diciendo que un perro es más importante que regular la vida de un ser humano".
"Ciertamente se están cambiando los valores, ya que se norma simplemente sobre la vida humana, pero se hacen leyes para los perros".
Según el Obispo, ante el problema de salud que los perros están significando para los pobladores "el ministerio (de Salud) debería sacar una norma, y por el bien de la comunidad, los perros que no tengan dueño se deberían sacrificar".
"Pero van a pasar diez años hasta que salga una ley sobre los perros", concluyó.