La Asociación de Líderes Católicos Latinos (CALL, por sus siglas en inglés) expresó su rechazo al proyecto de ley que violaría el secreto de confesión en el estado de California (Estados Unidos).
En un comunicado difundido este lunes 17 de junio, CALL expresó su oposición al proyecto de ley SB 360 que constituye "un intento para minar la libertad religiosa", ya que "los católicos se acercan al sacramento de la confesión para examinar sus conciencias y pedir la absolución".
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"Esta práctica es única para nuestra fe católica y cualquier intento del gobierno para legislar sobre lo que es sagrado solo puede ser visto como un ataque contra los católicos y una violación de la libertad religiosa otorgada por la Constitución de Estados Unidos".
El proyecto de ley originalmente buscaba exigir que los sacerdotes de California violaran el sello de confesión en cualquier momento en que obtuvieran conocimiento o sospecha de abuso infantil, al escuchar la confesión de cualquier penitente.
El texto fue modificado por el comité de asignaciones del Senado el 16 de mayo, sin embargo, aún requeriría que los sacerdotes informen a la policía sobre el conocimiento o la sospecha de abuso infantil obtenida en la confesión de otro presbítero o compañero de trabajo.
Lo que resta es que sea presentado ante el pleno del Senado para su debate y votación.
En una carta enviada a Anthony Rendon, presidente de la Asamblea Legislativa de California, los líderes latinos reconocieron que los abusos sexuales por parte de algunos miembros del clero "han sido horribles y expresamos nuestra total solidaridad con las víctimas".
"Nuestra Iglesia, como institución, siempre debe buscar que se traten adecuadamente estos hechos", por lo cual se ha trabajado en diversos protocolos para asegurar el bienestar de los más vulnerables "y remover a los sospechosos. La Iglesia ha aprendido de su pasado reciente", afirmaron.
Sin embargo, indicaron, "no podemos permanecer en silencio cuando un ente elegido intenta legislar para establecer limitaciones a nuestra libertad religiosa. El proyecto SB 360 no se puede realizar, no protege a los niños y solo puede describirse como un ataque vehemente contra nuestra fe y práctica católicas".
"Por favor, opónganse al proyecto SB 360", concluyen los líderes católicos latinos.