La Diócesis de Calama (Chile) emitió un comunicado para solicitar a las autoridades que extremen las medidas de seguridad ante los recientes acontecimientos de violencia.

El comunicado, publicado en su sitio web, surge a raíz de los últimos hechos criminales, que incluyen una balacera contra una comisaría y una terminal de autobuses que dejó dos muertos y varios heridos.

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Ante la preocupación que ello genera en esta comunidad del norte de Chile, la Iglesia llamó a la reflexión y planteó a las autoridades competentes "la necesidad de atender las inquietudes" que surgen de este clima marcado por la hostilidad.

"No podemos quedar indiferentes ante la angustia y dolor que deja este ambiente de inseguridad en que la mayoría declara tener que desenvolverse a diario", consideraron.

En esa línea, enumeraron "las angustias de la comunidad" que no se siente segura de circular por las calles ni duerme tranquila por miedo a los asaltos y otros delitos "que se han hecho comunes en estos tiempos".

Al recordar que Calama siempre "se caracterizó por la seguridad y buen ambiente", llamaron a "recuperar la paz y la armonía".

Por eso, exhortaron a las autoridades a extremar los esfuerzos con medidas "que garanticen convivir en ambientes seguros y sanos".

Asimismo, la Iglesia local se comprometió a generar "espacios de diálogo y reflexión" para favorecer la comunicación y fortalecer la armonía.

Finalmente, aseguraron sus oraciones por la comunidad, en especial por las víctimas de la violencia, los miembros de las fuerzas de seguridad, los niños y los jóvenes.

Los hechos ocurridos en Calama se suman a una serie de acontecimientos de violencia e inseguridad que preocupan a todo Chile, constituyendo uno de los mayores problemas que afronta el gobierno de Gabriel Boric.

En las últimas horas, ciudadanos marcharon por las calles exigiendo mayor seguridad. Además confirmaron la realización de un paro y suspendieron las clases por segundo día consecutivo.

Calama, que se encuentra a 1.550 kilómetros al norte de Santiago de Chile, fue seleccionada junto con otras 45 comunas para formar parte del plan "Calles sin violencia", un programa gubernamental que comenzará la próxima semana y que busca disminuir los índices de delincuencia.

El subsecretario del interior, Manuel Monsalve, expresó: "El mensaje es claro: Vamos a garantizar el orden y la seguridad en Calama".