Esta tarde en Roma, durante la Misa de la Cena del Señor del Jueves Santo y la ceremonia del lavatorio de pies, el Papa Francisco exhortó a los fieles a ser siempre "hermanos en el servicio" como enseñó Jesús a sus apóstoles, y a dejar de lado la ambición de dominar al otro.
La ceremonia se realizó cerca de las 5:30 p.m. (hora local) en el Centro Penitenciario de Velletri, localidad italiana ubicada a 60 km del Vaticano. Durante la visita, el Papa fue recibido por las autoridades del centro y se encontró con reclusos, personal civil y agentes de policía de prisiones.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
"Hemos escuchado lo que hizo Jesús, era interesante. Dice el Evangelio: sabiendo Jesús que el Padre le ha dado todo en sus manos, Jesús tenía todo el poder y después comienza a hacer este gesto de lavar los pies. Es un gesto que hacían los esclavos", dijo el Santo Padre al iniciar su homilía de este 18 de abril.
Explicó que si bien el Señor "tenía el poder" realiza "el gesto de un esclavo y después aconseja" a sus apóstoles: "Hagan también este gesto entre ustedes". "En otras palabras, sirvanse unos a otros, sean hermanos en el servicio, no en la ambición, como alguien que domina al otro o que pisotea al otro no, sean hermanos en el servicio".
"Cada uno de nosotros debe ser el servidor de los demás. Esta es la regla de Jesús y la regla del Evangelio: la regla de servicio, no de dominar, de hacer el mal, de humillar a otros. ¡Servicio!", recordó el Pontífice.
Luego, recordó otro pasaje evangélico en el que los apóstoles peleaban entre ellos y discutían quién era el más importante, entonces Jesús tomó a un niño y dijo: "Si el corazón de ustedes no es como el de un niño, entonces no serán mis discípulos".
"Hay que tener corazón de niño, siempre, humilde, servidor", resaltó el Obispo de Roma.
Más adelante, el Papa dijo que Jesús añadió "algo interesante que se puede conectar con el gesto de hoy". "Él dice: 'Ten cuidado: los líderes de las naciones dominan, pero entre ustedes no debe ser así. El más viejo debe servir al más pequeño. El que se siente más grande debe ser un siervo'. Todos nosotros también debemos ser sirvientes".
Finalmente, el Santo Padre pidió que los problemas entre personas sean "pasajeros" y que se animen a amar al otro.
Tras su homilía, el Pontífice lavó los pies a doce reclusos de esta cárcel durante la Misa "in Coena Domini". Según informó la Oficina de Prensa de la Santa Sede, los 12 detenidos proceden de 4 países diferentes: 9 son italianos, 1 de Brasil, 1 de Costa de Marfil y 1 de Marruecos.
Al final de la celebración, después del saludo del Director del Departamento de Prisiones y un intercambio de regalos, el Papa regresó al Vaticano.