La arquidiócesis de Corrientes (Argentina), a través de Cáritas, acompaña en estos días a las personas afectadas por las crecidas de los ríos Paraguay, Paraná y Uruguay con gestos solidarios y un trabajo coordinado y articulado con otras instituciones de la región, y expresa su cercanía y oración permanente para que las cientos de familias afectadas puedan sobrellevar de la mejor manera posible esta contingencia.
El Arzobispo de Corrientes, Mons. Andrés Stanovnik, pidió a los sacerdotes, religiosos y religiosas, diáconos y laicos acompañar con la oración y con el aporte material a las personas afectadas en varias localidades de la región.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
Los más afectados son los formoseños y los misioneros, reconocieron en Cáritas Arquidiocesana. Los inconvenientes se acrecientan particularmente para los que viven en localidades de la costa del río Uruguay, como las poblaciones de Garruchos, Garabí, Santo Tomé, Alvear, La Cruz y Paso de los Libres, en jurisdicción de la diócesis de Santo Tomé.
Cáritas Corrientes se mantiene en alerta desde el inicio de las inundaciones en las localidades de la costa del Paraná, que afectó y mantiene en vilo a las localidades de Ituzaingó, Itatí, Paso de la Patria, San Cosme, Santa Ana, Corrientes, Empedrado, Bella Vista, Goya, Santa Lucía y Esquina; y trabaja hoy en contacto con otras Cáritas por medio de aportes a un fondo solidario para emergencias.
La entidad caritativa de la Iglesia pidió reflexionar y ser generosos para ayudar a paliar esta emergencia desde el lugar de cada uno y en la medida de las posibilidades.