Con motivo de conmemorar los "20 años recorridos, de acercamiento, diálogo y beneficios diplomáticos" entre Israel y el Vaticano, el Arzobispo de Buenos Aires y Primado de Argentina, Mons. Mario Aurelio Poli señaló que "estamos muy contentos de tener a la comunidad judía en casa".
En un acto llevado a cabo el jueves 5 de diciembre en la Catedral de Buenos Aires, Mons. Poli subrayó que "la Iglesia tiene clara conciencia del significado del acercamiento entre las grandes religiones" y agregó que la religión judía es "de donde vienen nuestras raíces más profundas".
En la ceremonia estuvieron presentes el Nuncio Apostólico, Mons. Emil Paul Tscherrig; el Presidente de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA), Julio Schlosser; la Embajadora del Estado de Israel, Dorit Shavit; El Director para América Latina del Congreso Judío Mundial, Claudio Epelman.
También estuvo presente el Rabino, Abraham Skorka; el representante para América Latina del Centro Wiesenthal, Sergio Widder; el Presidente del Keren Kayemet Leisrael (Fondo Nacional Judío). Argentina, Adolfo Filarent , entre otros representantes diplomáticos y judíos.
Mons. Poli explicó "la iniciativa de la Santa Sede a través de la Nunciatura es para hacer memoria y un acto de acción de gracias a Dios por el acercamiento con el Estado de Israel", dijo que esto es "primero inspirados en el Concilio Vaticano II y muy puesto en práctica por el Beato Juan Pablo II".
Historia
El 30 de diciembre de 1993 diplomáticos de ambas partes firmaron un acuerdo que establecía el inicio de las relaciones diplomáticas entre ambos estados, culminando de esa manera un largo proceso que se inició en 1904, cuando Pío X concedió una audiencia al fundador del movimiento sionista, Theodor Herzl, quien esperaba obtener el apoyo del Vaticano al proyecto sionista.