La Arquidiócesis de San Antonio, en el estado de Texas (Estados Unidos), ha retirado del ministerio a dos de sus sacerdotes tras recibir acusaciones fundadas de abuso sexual contra menores.
El P. Alejandro Ortega, de la iglesia de Santa Mónica, en la localidad de Converse, y el P. Jesús Eduardo "Lalo" Martínez-Solís, de la iglesia de St. Joseph-Honey Creek, en Spring Branch, han sido acusados de abusar sexualmente de menores. Las denuncias han sido remitidas a la policía local, según informa la arquidiócesis.
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A ambos se les han retirado sus facultades ministeriales y tienen prohibido identificarse como sacerdotes, así como vestir ropa y títulos clericales.
En el caso de Ortega, el menor denunció los abusos durante un retiro. La parroquia notificó a los padres del adolescente y a la arquidiócesis, que remitió las acusaciones a la División de Delitos Especiales del Fiscal de Distrito del Condado de Bexar, según un comunicado del Arzobispo de San Antonio, Mons. Gustavo García-Siller.
Un investigador privado llevó a cabo una investigación sobre las acusaciones contra el P. Ortega y la junta de revisión arquidiocesana, que asesora al arzobispo sobre las acusaciones de abuso sexual por parte del clero, las examinó.
Había "suficientes pruebas de contacto físico sexual inapropiado con un menor como para requerir que remita el asunto al Dicasterio para la Doctrina de la Fe a fin de que emita su juicio al respecto", señala la declaración del Arzobispo.
"Me gustaría expresar públicamente mi gratitud a la sobreviviente por presentarse valientemente y ayudar a nuestra Iglesia compartiendo esta experiencia personal y dolorosa", afirmó Mons. García-Siller.
"Espero que esto también ayude al proceso de sanación y sirva de inspiración a otros sobrevivientes de abusos sexuales para que denuncien a las autoridades estos trágicos incidentes", añadió.
Ortega, anteriormente sacerdote de los Legionarios de Cristo, se incardinó en la arquidiócesis el 22 de febrero de 2021, según un comunicado de la arquidiócesis del 25 de marzo del mismo año.
El P. Martínez-Solís, por su parte, había servido anteriormente en la arquidiócesis de Chicago y fue incardinado en la arquidiócesis de San Antonio el 24 de febrero de 2021, de acuerdo a lo indicado por un portavoz arquidiocesano.
En una declaración separada, Mons. García-Siller destacó que se había recibido una denuncia contra el P. Martínez-Solís a través de la línea directa de mala conducta de la arquidiócesis el 25 de julio. Martínez-Solís fue retirado del ministerio al día siguiente y la denuncia fue remitida al Departamento del Sheriff del Condado de Comal.
Un investigador independiente también investigó de forma privada las acusaciones en el caso del P. Martínez-Solís. Después de examinar el informe de la investigación, la junta de revisión de la arquidiócesis indicó que las acusaciones estaban fundamentadas y que el arzobispo debía remitir el caso al Dicasterio para la Doctrina de la Fe, según refiere el comunicado.
"Nuestra investigación puso de relieve la importancia de nuestro código de conducta y directrices para el ministerio con menores, y del valor de nuestra formación Virtus, que nos ayudó a abordar esta mala conducta de manera oportuna y prevenir abusos más graves", explicó el Arzobispo.
"Me gustaría expresar mi gratitud y respeto al adolescente menor de edad que valientemente se presentó y ayudó a nuestra Iglesia al participar en la investigación", agregó.
"La arquidiócesis se toma en serio cualquier acusación de conducta sexual inapropiada con menores. La seguridad y el bienestar de todas las personas son muy importantes, y las políticas de ambiente seguro de la Iglesia buscan proteger a todos los hijos de Dios", subrayó el Prelado.
Mons. García-Siller animó a cualquier víctima de abusos sexuales a ponerlo en conocimiento de las fuerzas del orden y a cualquier víctima dentro de la arquidiócesis a ponerse en contacto con la Oficina de Asistencia a las Víctimas y Entorno Seguro, al teléfono +1 210-734-7786.
Un tercero también puede denunciar estos incidentes a través de la Línea Directa de Mala Conducta de la Arquidiócesis al teléfono +1 844-709-1169.
"Me comprometo a seguir trabajando para que cada Iglesia, escuela e institución católica sea un puerto seguro para todos nuestros niños. Por favor, únanse a mí en oración mientras ayudamos a todos y cada uno de los que puedan ser víctimas de abuso sexual", aseguró Mons. García-Siller.
Traducido y adaptado por el equipo de ACI Prensa. Publicado originalmente en CNA