Por Blanca Ruiz
A pesar de que el Ayuntamiento de Madrid rechazó que la decoración navideña de la capital tuviera ningún sentido religioso, un grupo de jóvenes decidió montar la noche del 21 de diciembre un sencillo portal de Belén en la Puerta de Alcalá en el centro de la capital.
Este ha sido el primer año en el que la decoración navideña de la capital española no cuenta con un pesebre en la Puerta de Alcalá ya que el gobierno de Manuela Carmena decidió cambiarlo por unas luces en forma de flor.
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Según ha podido saber ACI Prensa, los impulsores de la iniciativa destacan que no se trata de una acción política sino que con ella pretenden reivindicar el verdadero sentido de la Navidad, no como época de consumismo sino de celebración del nacimiento del Hijo de Dios.
El Nacimiento está formado por tres siluetas que representan a la Sagrada Familia, de dos metros de alto de material de poliespán alzadas con hilo de pescar en uno de los cables de la decoración navideña.
La puerta de Alcalá se encuentra a escasos 300 metros del Ayuntamiento de la ciudad.
