El Padre Federico Lombardi, Director de la Sala de Prensa de la Santa Sede, explicó el proceso que se sigue en el caso de Paolo Gabriele, el mayordomo del Papa acusado de filtración de documentos reservados del Vaticano, y desmintió a los medios italianos que intentan involucrar en este delito a un cardenal italiano.
El sábado 26 de mayo el sacerdote explicó que la primera fase del proceso ya ha concluido y que Gabriele cuenta con dos abogados defensores. Dijo que la fase de investigación formal ha sido iniciada bajo la dirección del Juez Instructor, el profesor Piero Antonio Bonnet.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
Esta fase "continuará hasta que se adquiera una retrato adecuado de la situación objeto de investigación, después de lo cual, el juez de instrucción procederá al juicio o la sentencia absolutoria".
Paolo Gabriele, casado y padre de tres hijos, era uno de los miembros de la llamada "familia pontificia", el grupo de 9 personas que sirve de manera personal al Papa en el apartamento pontificio. Fue arrestado en la tarde del miércoles 23 de mayo luego que en su apartamento se encontraran documentos reservados de la Santa Sede. Permanece detenido en la Gendarmería Vaticana.
En declaraciones a los periodistas esta mañana, el Padre Lombardi explicó que Gabriele "participó en la Misa" ayer domingo y "esta mañana tuvo la visita de su esposa y de los abogados que ha nombrado".
El sacerdote desmintió las versiones de cierta prensa "como el hecho de que hubiera algunos aparatos de grabación, de reproducción en su casa, o el hecho de que su familia se haya trasladado afuera del Vaticano. No es verdad".
El sacerdote dijo luego que Carlo Fusco, abogado de Gabriele, ha afirmado que el acusado tiene el deseo de colaborar con el caso, aclaró que la esposa de Gabriele no "ha concedido jamás una entrevista" y que el mayordomo se encuentra "muy sereno y tranquilo". Los abogados también expresaron su "estupor" por las versiones de algunos diarios que afirman tener elementos del caso que ellos desconocen.
No hay cardenal involucrado
El Padre Lombardi desmintió además que, como han dicho algunos medios hoy, exista algún cardenal italiano sospechoso. "Lo desmiento del modo más total, no hay ningún cardenal italiano o no italiano sospechoso de modo particular", indicó.
El sacerdote pidió considerar que "la comisión cardenalicia nombrada por el Papa escucha a diversas personas, entre ellos cardenales que son responsables de diversos despachos de la curia, pero esto no significa en absoluto que haya motivos de sospecha. Lo desmiento y no tiene fundamento".
"También desmiento que haya alguna mujer investigada, en una entrevista o presunta entrevista de un diario italiano, se hablaba de un grupo de relatores nombrados por el Papa y dirigidos por una mujer".
"Estamos en la pura fantasía, no hay en absoluto ningún fundamento sobre esto, y os invito a dudar en las entrevistas de este tipo", prosiguió.
Sobre el papel de la comisión de cardenales creada por el Papa para investigar las filtraciones, el Director de la Sala de Prensa de la Santa Sede dijo que ellos tienen "un mandato más amplio, pueden entrevistar a personas de distintos dicasterios, para pedir información de profundización, aunque no haya elementos concretos que justificar. Recogen información y testimonios para hacerse un cuadro más completo de la situación".
El Padre Lombardi indicó que los cardenales deben luego informar al Papa sobre los resultados de sus investigaciones.
Sobre las supuestas "luchas de poder" internas en el Vaticano, el sacerdote consideró estas versiones como exageradas y sin fundamento, por lo que hizo un llamado "a la objetividad".
Contexto
El arresto de Gabriele sigue al anuncio del Vaticano sobre la demanda tras la publicación de un libro con documentos reservados recopilados por el periodista italiano Gianluigi Nuzzi. El texto lleva el título de "Su Santidad: Los documentos secretos del Vaticano".
Aunque algunos afirman que Gabriele podría ser declarado culpable del crimen de posesión ilegal de documentos de un Jefe de Estado, lo que está penado con 30 años de cárcel, el Padre Lombardi dijo el sábado que la idea es acusarlo solo de "robo agravado".
Algunos medios italianos han publicado hoy declaraciones de personas anónimas que se autodenominan "los cuervos", señalando que "Paolino", como llaman a Paolo Gabriele es solo un "chivo expiatorio" y afirman que han hecho estas maniobras para ayudar al Santo Padre.
Sin embargo, ninguna fuente anónima ha sido capaz de responder a la pregunta "¿Como ayuda al Papa la filtración de documentos y correspondencia secreta que traen mala prensa a la Santa Sede?"
El Padre Lombardi concluyó sus declaraciones indicando que "naturalmente, el Papa está informado y es consciente de la situación delicada que se está dando también en la Curia Romana, pero conserva su habitual serenidad, su comportamiento de gran superioridad de fe, como vieron en la celebración de ayer".