La madre de la adolescente de 14 años que fue violada por un familiar en Posadas, provincia de Misiones, en Argentina, decidió retirar el pedido de aborto para su hija, con lo que el bebé por nacer se salvó de morir.
La madre de la adolescente confirmó que retiró la solicitud de aborto ante la justicia, debido a que ya tenía más de diez semanas de gestación y había un claro riesgo para la salud de la menor.
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La adolescente permanece internada en el hospital Materno Neonatal y recibe ayuda psicológica.
Sobre el caso, el Obispo de Oberá (Argentina), Mons. Damián Bitar, opinó que le parece increíble el ensañamiento actual de algunos contra la vida ya concebida, que incluso se ciega la opción de dar al bebé en adopción a uno de los cientos matrimonios que esperan en una larga lista.
El Obispo cuestionó a los que "dicen querer ayudarla para que supere el trauma de la violación y el embarazo, desconociendo lo que el sentido común y los médicos y psicólogos afirman: las heridas y traumas crecerán si se suma el saber que se asesinó a un bebé que no es culpable de nada".
También expresó su malestar ante quienes abogan por asesinar a los bebés, fruto de violación, y una vez logrado el cometido, se desentienden de las personas a las que se indujo a abortar.
"¡Qué dolorosa paradoja! En el mes en que celebramos el Día del Niño debemos observar atónitos que se pida dictar, lisa y llanamente, una sentencia de muerte sobre un niño ya concebido", sostuvo el Prelado.
Finalmente, Mons. Bitar se preguntó si "¿se pedirá la misma sentencia para el violador? ¿Acaso hay derecho a matar? ¿Por qué quienes dicen defender los ‘derechos humanos’ no defienden el Derecho a Nacer? ¿De qué valen tantos avances en medicina para prolongar la vida si se impide a tantos nacer?"