El Cardenal Jorge Medina Estévez, Prefecto Emérito de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, resaltó que los católicos de Chile no deben votar por "nadie que promueva el aborto o las uniones homosexuales", cuando en este país se realizará la segunda vuelta de las elecciones presidenciales el domingo 17 de enero.
En una reciente entrevista concedida al diario La Segunda, el Cardenal que hace poco ha cumplido 25 años como obispo, señaló que si bien el país del sur ha experimentado un "crecimiento muy grande" en el aspecto económico, todavía hay una serie de problemas en el ámbito moral y espiritual.
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"En estos últimos 25 años y en materias valóricas se han tomado decisiones sumamente negativas, como la introducción del divorcio", la distribución "de la píldora del día después o, tal como se está promoviendo ahora, la legislación que equipara las uniones de hecho con el matrimonio, incluso de personas homosexuales", explicó el Purpurado.
Al ser preguntado sobre por quién se ha de votar en las próximas elecciones, el Cardenal Medina contestó: "por el menos malo". Seguidamente precisó que "nadie que promueva el aborto o las uniones homosexuales puede recibir los votos de un católico. Entonces, en algunas ocasiones hay que votar por el menos malo, o por el que está acompañado de gente menos peligrosa".
Al hablar de lo que espera del próximo Presidente de Chile, el Cardenal –que anunciara al mundo que Benedicto XVI había sido elegido como sucesor de Juan Pablo II al final del cónclave de 2005– expresó su deseo de que el siguiente mandatario "no mintiera nunca y no protegiera a quienes son deshonestos en el manejo de los dineros públicos. Espero que se preocupe de todos los chilenos, particularmente de los que más sufren. Y creo fundamental que exista una tarea especial por la educación, donde no estamos en buen pie".
Refiriéndose luego a su relación con la actual Presidenta, Michelle Bachelet, el Prefecto Emérito indicó que "no la conozco personalmente. En varias oportunidades le he hecho llegar fotocopias del material pornográfico que publica el diario La Nación. Nunca he tenido respuesta. También le he enviado material científico sobre la píldora del día después. Tampoco me han respondido nada grato".
"Es claro que me ignoran" y tienen "todo el derecho" porque, dijo, "soy una persona bastante anciana (83 años) y los ancianos suelen ser ignorados".