En declaraciones a Unión Radio, el Arzobispo de Mérida y Presidente de la Comisión de Cultura y Medios de la Conferencia Episcopal de Venezuela (CEV), Mons. Baltazar Porras, lamentó la insistencia del Presidente Hugo Chávez de vincular a la Iglesia con el intento de golpe de abril de 2002.
El Prelado recordó que en aquella oportunidad el mismo Chávez agradeció en privado a los obispos por haberlo resguardado pero en público ha repetido un "cliché" que forma parte de "una burda manipulación" para "golpear, calumniar a una institución como la Iglesia".
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
"Estamos de nuevo ante una arremetida que quiere quitarle a la Iglesia su participación que fue muy clara y trasparente en ese momento. Estamos ante una burda manipulación. Se quiere hacer ver que la Iglesia está dividida y que un grupo está con el pueblo y el otro con las cúpulas podridas del país", indicó el Arzobispo.
Según recordó Mons. Porras, "es el mismo cliché de los días posteriores al 11 de abril de 2002, sucesos que el gobierno ha querido endilgarle a la Iglesia. Esto entra en contradicción con lo que el propio Presidente de la República el 24 de abril dijo en el encuentro que tuvo con todo el episcopado durante varias horas. Es curioso que las primeras palabras que dijo para ese entonces fue el agradecimiento que el Presidente dirigió de manera concreta al señor Cardenal Velasco y en segundo lugar a mi persona por la participación que habíamos tenido en los acontecimientos de esos días y por el resguardo a su persona".
El Arzobispo recordó que en esa ocasión le dijo al Presidente que sería bueno que expresara lo mismo "en público y ante los medios de comunicación y eso nunca se dio, desde entonces siempre se ha querido endilgar esa participación de la Iglesia en esos sucesos" de abril de 2002.
Los hechos
En abril de 2002, "lo único que hicimos fue acudir a un llamado del propio Presidente para cumplir con un deber sacerdotal y humanitario que era el resguardo de su vida y de quienes estaban junto a él y ahora quiere hacer aparecer a la Iglesia como parte del complot en contra de él", precisó.
Asimismo, recordó cómo el Presidente Chávez pidió ayuda a la Iglesia en aquella ocasión. "En la medianoche del 11 para el 12 de abril, Rodríguez Chacín, para entonces ministro de interior me dijo que el Presidente deseaba hablarme, me pasó el teléfono y el Presidente me dijo: ‘Perdóneme todas las barbaridades que he dicho sobre usted, lo llamo para saber si usted está en la disposición de resguardar mi vida y de las personas que están conmigo’".