El "Servicio a la Vida (SEVI) del Movimiento FUNDAR en Argentina, presentó esta semana una síntesis del tema de la Cultura de la Vida y la Familia en el “Documento de Síntesis” rumbo a la V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano que se realizará en Aparecida, Brasil, del 13 al 31 de mayo de 2007.
Según informa SEVI, “la familia y la vida no están ausentes de esta importante Conferencia eclesial. Se presentan como desafíos particularmente urgentes y así lo reconoce el documento de síntesis que se ha publicado recientemente con los aportes de las Conferencias Episcopales participantes".
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Respecto del tema "Exclusión de la mujer", SEVI remite al n 51 del documento de síntesis, donde se señala la "doble exclusión en razón de su situación socioeconómica y de su sexo" en las mujeres pobres; así como que "su urgente dignificación y participación pretende ser distorsionada por corrientes de un feminismo ideológico, marcado por la impronta cultural de las sociedades del consumo y el espectáculo, que es capaz de someter a las mujeres a nuevas esclavitudes”.
Respecto de la "Crisis de la familia", el número 66 del documento enumera “presupuestos que debilitan y menoscaban la vida familiar” así como "la ideología del género, según la cual cada uno puede escoger su “orientación sexual” y las respectivas prácticas, no teniendo relevancia las diferencias fisiológicas; la ideología ecologista que presenta al hombre como el mayor depredador y por eso, el hombre debe someterse a la Madre Tierra, y el número de individuos admitidos a la existencia debe ser contenido en límites definidos por los tecnócratas; el humanismo agnóstico, que reduce voluntariamente el área de competencia de la razón, limitando el ejercicio de la misma a la esfera de los fenómenos, y descalificando a priori toda indagación relativa al sentido de la vida y de la muerte, o al sentido del misterio”.
SEVI recuerda al respecto que "el documento no ignora las intensas campañas que se verifican en toda América Latina para influir en la legislación sobre la familia con el objetivo de lograr "la emancipación de las costumbres, las normas éticas y las leyes de su matriz cristiana. Con frecuencia responden a los intereses y estrategias de personas e instituciones con gran poder y presencia internacional, que abiertamente buscan provocar un cambio en el ethos cultural y religioso latinoamericano”.
Sobre la "Dignidad del niño por nacer", se señala el número 121 del documento, donde se señala que "asistimos hoy a retos nuevos en el campo de la bioética que nos piden ser voz de los que no tienen voz, donde no podemos excluir a los niños por nacer y ni a nuestros ancianos al final de sus días. La vida que está creciendo en el seno materno y la que se encuentra en el ocaso, es un reclamo de vida digna que grita al cielo y que no puede dejar de estremecernos. No hay vida humana tan indefensa como la del niño por nacer. La liberalización y canalización de las prácticas abortivas son crímenes abominables".
Respecto de la "Pastoral familiar" en el tercer capítulo, se enfatiza que "se requiere una Pastoral Familiar que apuntale acciones que proclamen el Evangelio de la Familia y promuevan la cultura de la vida contra todo relativismo, confusión de modelos, desconciertos e ideologías que desconocen la centralidad de la persona humana y su dignidad, así como el valor de la familia, basada en el matrimonio para toda la vida entre un hombre y una mujer”.
Finalmente, SEVI señala que en el número 344 del documento, hablando de los desafíos de orden social que enfrenta la evangelización se destaca que “los anhelos de vida, de paz, de fraternidad y de felicidad, que no encuentran respuesta en medio de los ídolos del lucro y la eficacia, la falta de libertad religiosa, la insensibilidad ante el sufrimiento ajeno, la corrupción de las clases dirigentes, los ataques a la vida intrauterina, y todas las modalidades de violencia, indican la importancia de la lucha por la vida y por la dignidad y la integridad de la persona humana”.