En su habitual Audiencia General de los miércoles, el Papa Benedicto XVI recordó día por día el viaje que hizo la semana pasada a Turquía y renovó sus votos porque este país construya un futuro de paz y “pueda ser un 'puente' de amistad y de colaboración fraternal entre Occidente y Oriente”.

La Audiencia de hoy tuvo dos partes. El Papa primero se reunió en la basílica vaticana con fieles de diversas ciudades de Italia y, posteriormente, se encontró con los peregrinos de otros países en el Aula Pablo VI.

Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram

Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:

En este último lugar dedicó su habitual reflexión semanal al viaje apostólico que realizó a Turquía del 28 de noviembre al 1 de diciembre y recordó que los viajes papales “contribuyen a realizar su misión que se realiza en ‘círculos concéntricos’”, en el más interno de los cuales "el Sucesor de Pedro confirma a los fieles católicos en la fe, en el intermedio encuentra a los demás cristianos y en el más exterior se dirige a los no cristianos y a la entera humanidad".

Según explicó el Papa, a este último círculo correspondió su primera jornada en Turquía, cuando se reunió con las autoridades civiles. 

Esos encuentros fueron "una parte muy importante de la visita sobre todo porque Turquía es un país de amplia mayoría musulmana que se regula en cambio por una constitución que afirma la laicidad del estado. Es, por lo tanto, un país emblemático del gran reto planteado hoy en ámbito mundial: por una parte es necesario redescubrir la realidad de Dios y la importancia pública de la fe religiosa y por otra garantizar que la expresión de esa fe sea libre, sin degeneraciones fundamentalistas y capaz de repudiar por tanto cualquier forma de violencia", indicó.

Asimismo, recordó que ha insistido en la importancia de que "cristianos y musulmanes se comprometieran en favor de la vida, la paz y la justicia, reafirmando que la distinción entre la esfera civil y la religiosa constituye un valor y que el Estado debe garantizar la efectiva libertad de culto".

En el ámbito del diálogo interreligioso, se refirió "al gesto inicialmente no previsto y que se reveló muy significativo: la visita a la Mezquita Azul de Estambul", donde "permaneciendo algunos minutos en recogimiento en ese lugar de oración me dirigí –dijo– al único Señor del cielo y de la tierra".

También recordó su jornada en Éfeso, donde se encontró "en el círculo más interno del viaje, en contacto directo con la comunidad católica", y " en un clima de paz rezamos por la paz en Tierra Santa y en todo el mundo".

El Santo Padre destacó que el círculo intermedio, el de las relaciones ecuménicas, ocupó la parte central del viaje. El Papa "tras las huellas de Pablo VI y Juan Pablo II" renovó con Su Santidad Bartolomé I "el compromiso recíproco de proseguir el camino hacia el restablecimiento de la comunión plena entre católicos y ortodoxos" y firmó con el patriarca ecuménico "una declaración conjunta que constituye una etapa ulterior en este camino", además de visitar al patriarca de la Iglesia Armenia Apostólica, al metropolita Sirio-Ortodoxo y al gran rabino de Turquía.

Su visita, afirmó, concluyó con el regreso "al círculo más interno encontrando a la comunidad católica presente en cada uno de sus componentes en la catedral latina del Espíritu Santo en Estambul", celebrando una Misa a la que asistieron también, cristianos de otros ritos, ortodoxos y protestantes.

El Papa terminó el relato pidiendo a Dios que ayudase "al pueblo turco, a sus gobernantes y a los representantes de las diversas religiones a construir juntos un futuro de paz para que Turquía pueda ser un ‘puente’ de amistad y de colaboración fraternal entre Occidente y Oriente".

Con los italianos

Previamente, al reunirse con los feligreses de las diócesis italianas del Lacio, que acompañaban a sus obispos con motivo de la visita "ad limina", el Santo Padre los animó “a profundizar cada vez más en vuestra vida de fe, teniendo claramente presentes las orientaciones del reciente encuentro de la Iglesia italiana en Verona", que tuvo lugar en octubre pasado.

anunciarlo con vuestra vida en familia