Martes 20 de marzo
Evangelio según San Mateo capítulo 18, versículos del 21 al 35
El siervo sin entrañas
21 Entonces Pedro le dijo: "Señor, ¿cuántas veces pecará mi hermano contra mí y le perdonaré? ¿Hasta siete veces?" 22 Jesús le dijo: "No te digo hasta siete veces, sino hasta setenta veces siete. 23 Por eso el reino de los cielos es semejante a un rey que quiso ajustar cuentas con sus siervos. 24Y cuando comenzó a ajustarlas, le trajeron a uno que le era deudor de diez mil talentos. 25 Como no tenía con qué pagar, mandó el Señor que lo vendiesen a él, a su mujer y a sus hijos y todo cuanto tenía y se pagase la deuda. 26 Entonces arrojándose a sus pies el siervo, postrado, le decía: "Ten paciencia conmigo, y te pagaré todo". 27 Movido a compasión el amo de este siervo, lo dejó ir y le perdonó la deuda. 28 Al salir, este siervo encontró a uno de sus compañeros, que le debía cien denarios y agarrándolo, lo sofocaba y decía: "Paga lo que debes". 29 Su compañero, cayendo a sus pies, le suplicaba y decía: "Ten paciencia conmigo y te pagaré". 30 Mas él no quiso, y lo echó a la cárcel, hasta que pagase la deuda. 31 Pero, al ver sus compañeros lo ocurrido, se contristaron sobremanera y fueron y contaron al amo todo lo que había sucedido. 32 Entonces lo llamó su señor y le dijo: "Mal siervo, yo te perdoné toda aquella deuda como me suplicaste. 33 ¿No debías tú también compadecerte de tu compañero, puesto que yo me compadecí de ti?" 34 Y encolerizado su señor, lo entregó a los verdugos hasta que hubiese pagado toda su deuda. 35 Esto hará con vosotros mi Padre celestial si no perdonáis de corazón cada uno a su hermano".
Comentario
22. Es decir: siempre. Dedúcese de aquí la misericordia sin límites, con que Dios perdona, puesto que Jesús nos presenta a su Padre como modelo de la misericordia que nosotros hemos de ejercitar (Luc. 6, 35 s.).
24. Diez mil talentos: más de 50 millones de pesos.
28. Cien denarios: menos de cien pesos, esto es, una suma enormemente inferior a la que debía él a su amo.
35. Aplicación de la quinta petición del Padre Nuestro. Véase 6, 14 s.
Estos comentarios corresponden a la versión electrónica de la Biblia y Comentario de Mons. Juan Straubinger, cortesía de VE Multimedios