Una nueva estrategia para propagar el movimiento provida, incidiendo en los perjuicios que el aborto causa a la mujer, la segunda víctima de las leyes y la mentalidad antivida.
El aborto, en la mayor parte del mundo, ha sido legalizado basándose en dos razones falsas:
- Una de ellas dice que el aborto únicamente destruye "un grupo de células", no una vida humana.
- La segunda razón es que el aborto es seguro, y que ayuda a la mujer a controlar y mejorar su vida.
Durante las últimas dos décadas, el movimiento pro-vida ha concentrado todos sus esfuerzos para probar que la primera de estas razones no es válida. Millones de dólares se han invertido en campañas publicitarias, libros, anuncios, e importantes películas como El Grito Silencioso, para demostrar a la gente que el niño no-nacido es una vida humana.
Estos esfuerzos informativos, han tenido un gran éxito. Encuestas de opinión pública muestran que el 65% o más de la población, piensan que el aborto es moralmente malo, sin embargo, muchos dentro de este mismo grupo creen que debe ser legalizado. Estudios muestran que aún en mujeres que han practicado un aborto, aproximadamente el 70% creen que el aborto es moralmente malo, o por lo menos un mal comportamiento. Estas mujeres eligen el aborto, no porque estén conscientes o no de su derecho a abortar, pero piensan que no tienen otra opción.
La gran mayoría de las personas saben que el aborto es quitarle la vida a un ser humano. Incluso muchos abortistas admiten esta verdad y por lo tanto, han dejado de defender la idea de que el aborto es solo destruir un"grupo e células" y la han cambiado por el siguiente reclamo: "Los derechos y necesidades de la mujer son más importantes que los derechos de un feto"
Una nueva estrategia
En todo esto, hay una lección importante que aprender:
Todos los esfuerzos que se realicen para sensibilizar a las personas en cuanto a demostrar que el bebe es un ser humano desde su concepción, motivará a los que están a favor de la vida, pero estos esfuerzos no tendrán ningún efecto en aquellos que defienden el aborto. Estas personas han endurecido su corazón hacia el "feto". Biológicamente, pueden aceptar que sea un ser humano, pero están convencidos que el niño no-nacido es menos importante que la mujer. Cualquier información que se presente, no los hará cambiar su posición.
La lucha de los abortistas está enfocada totalmente hacia la mujer. Por lo tanto, la única manera de luchar contra ellos, es enfocar los esfuerzos pro-vida hacia la mujer. Es necesario cambiar el debate del aborto y discutir sobre su mismo punto de fuerza: los intereses de la mujer.
Por lo tanto, se deben concentrar todos los esfuerzos pro-vida en probar que la segunda razón para hacer legal el aborto es falsa, el aborto no es seguro. El decir que "el aborto es seguro" es la razón más fuerte de los abortistas.
El aborto lastima a la mujer. En muchos casos, ocasiona un daño irreparable a la función reproductiva de la mujer. En los últimos diez años, se ha comprobado que tiene graves daños psicológicos y emocionales.
En muchos casos, el trauma post-aborto es psicológicamente devastador, afectando sus relaciones familiares, amistades e incluso laborales.
Actitudes frente al aborto
Los psicólogos nos describen tres niveles de conciencia moral o actitudes hacia el problema del aborto:
- En el más bajo nivel es cuando afecta
únicamente a uno mismo.
- El segundo nivel es cuando afecta a alguna persona cercana: familiares, amigos
o conocidos.
- El tercer nivel es cuando afecta a personas ajenas, desconocidas, no nacidas.
Es en este tercer nivel donde el movimiento pro-vida está trabajando. Todos los argumentos a favor del niño no nacido son efectivos para las personas con éste nivel moral.
Para sensibilizar a las personas del primero y segundo nivel, se deben informar todos los riesgos y problemas que causa el aborto a mujeres adultas y adolescentes. Presentar el daño que puede hacer el aborto a sus hijas, esposas o novias. En caso que una mujer considere el aborto, que este enterada de lo que le puede afectar a sí misma.
En el caso del padre de una adolescente embarazada de catorce años, él solo está preocupado por la situación de su hija y no de su nieto al cual lo considera todavía como algo abstracto. Lo único que él puede ver en ese momento es que el embarazo destruye los sueños del futuro de su hija, perdiendo todas las oportunidades y retos que la vida le puede presentar. Aunque su hija quisiera tener al bebe, consideraría la opción del aborto por su "propio bien" pues pensaría que el conservar al bebe, es solamente una "fantasía juvenil".
Para poder convencer a estos padres, no es suficiente darles datos acerca del desarrollo del bebe, sino los efectos destructivos que provoca el aborto en las adolescentes. Deben estar informados de los riesgos de un daño permanente en el aparato reproductivo y de los traumas psicológicos post-aborto.
Los familiares de adolescentes embarazadas deben saber que más del 90% de las mujeres que han abortado tienen problemas de autoestima. Cerca del 50% han incrementado el uso de drogas y alcohol. El 60% han tenido tendencias a suicidarse. Otros problemas son promiscuidad, depresión, problemas de concentración, tensión emocional, stress y cambios de personalidad entre otros problemas.
En el momento en que una adolescente está embarazada, se encuentra en la decisión de tener al bebe o realizar un aborto, es una decisión entre tener al bebe o... tener una experiencia traumática.
El 52% de las mujeres que han abortado, reportan que han sido "forzadas por alguien". Es indispensable educar a este "alguien" acerca de los riesgos del aborto, ya que están lastimando a las personas que aman por quererlas ayudar. Mientras no se logre que los padres, novios, consejeros o médicos estén conscientes del peligro del aborto para la mujer, seguirá habiendo "abortos por tu propio bien".
Una estrategia - muchas victorias
La estrategia es simple: Realizar todos los esfuerzos para informar y convencer a todo el público, acerca de los peligros que representa el aborto en la salud mental, emocional y física de la mujer. El enfoque principal es sobre la mujer.
Esta estrategia tendrá varios efectos:
1) El conocimiento de los riesgos del aborto, hará que disminuya el número de abortos. Familiares, amigos y novios, dejarán de presionar a la mujer para que aborte por su "propio bien".
2) Si los efectos post-aborto se documentan perfectamente, las mujeres que sufren este trauma, tendrán el valor para rechazar la falsa información que les puedan dar las clínicas o consejeros abortistas.
3) En el momento en que se publiquen los efectos del aborto, muchas mujeres que han abortado, podrán entender las causas de sus problemas psicológicos y recurrirán a programas de tratamiento y ayuda post-aborto, así como contar con una ayuda espiritual y psicológica. Estas mismas mujeres ayudarán a los movimientos pro-vida, ya que ellas mismas hablarán de los efectos negativos del aborto.
4) Hasta el momento, muchas personas están convencidas por los abortistas de que el aborto "ayuda a la mujer". Pero en el momento que se den cuenta que la realidad es que sí daña a la mujer, entonces matar bebes que no han nacido no tiene ningún sentido.
5) Se podrán demandar derechos para la mujer que ha abortado. Que cuenten con la ayuda necesaria para todos los tratamientos que requiera
6) Al presentar información a los políticos que entran en sus nuevos cargos, que estudios han demostrado que el aborto es peligroso para la mujer y le ocasiona diversos problemas de salud, se puede lograr que tomen una actitud de rechazo hacia las posturas abortistas.
7) Si los riesgos que produce el aborto están perfectamente documentados, los jueces que decidan si se debe practicar o no el aborto, tenderán a defender los derechos de la mujer y de los niños.
Que el aborto no sea una opción
No debemos olvidar que lo más importante que se quiere lograr es que además de que el aborto no sea legal, sea "impensable".
Lograr cambiar la percepción que tiene la gente de que el aborto es "seguro y legal". Debemos convencer al público que aún aunque el aborto sea legal, jamás será seguro.
Nuestro ideal es que toda persona que se compadezca de una joven que está embarazada, nunca se atreva a aconsejarla que aborte, ya que está perfectamente informada y consciente de los daños espirituales, físicos y emocionales que le provocará después..
Lograr que todas las personas crean que la verdad fundamental es que cuando lastimamos a un bebe que no ha nacido, también lastimamos a su mamá y lo contrario: cuando ayudamos a la madre, también ayudamos al bebe. Por lo tanto, la solución de un embarazo no deseado, o de una adolescente embarazada, no es el aborto, sino estar bien informada acerca de los daños que le ocacionará a ella misma y a las personas que la quieren.
C. Reardon (con la colaboración de Álvaro Fernández).
Fuente: http://www.arbil.org/